Atzo, ekainaren 11an,
buelta bat ematen ari ginen txirrindulaz Askartzatik Ilarrazara , eta trenbide ondoan dauden urmaeletan, pista
erdian hiru karramarro amerikarrak topo egin genituen. Tente zeuden erasotzeko
prest bere matxardekin desafiatu egiten gintuzten.
PROCAMBURUS
CLARKII
Ayer, 11 de junio, cuando estábamos dando una vuelta
en bici desde Ascarza hasta Ilárraza,, al llegar a las balsas que están junto a
la vía del tren, en medio del camino nos encontramos con tres cangrejos
americanos que nos esperaban medio erguidos y moviendo sus pinzas
amenazadoramente.
La ocupación francesa
estaba en franco retroceso. En enero de 1812 Wellington conquistó Ciudad
Rodrigo y en abril sería Badajoz. Posteriormente, en julio, se produjo la
victoria de Arapiles y a continuación, en agosto, la entrada del duque en
Madrid. Sin embargo, a partir del sitio al castillo de Burgos los franceses
pasan a la ofensiva y Wellington vuelve a Portugal.
A finales del 1812 la
derrota en Rusia planea sobre el imperio. Napoleón debe retirar tropas de la
península y José Bonaparte sale de Madrid el 17 de marzo rumbo a Valladolid. La
abandona el 3 de junio, dirigiéndose a Palencia, y posteriormente a Burgos
saliendo de la ciudad castellana el día 13 de junio. Finalmente, después de
pasar por Miranda de Ebro, los soldados imperiales acampan el 19 de junio en la
Llanada de Vitoria.
Jourdan
La idea de Wellington
era cortar la retirada a los franceses por el camino de Arlabán y al efecto se
acordó que el general Graham avanzase con sus 20.000 hombres desde Murguía por
Záitegui y Echávarri a tomar el alto de Araca y los puentes de Arriaga, Gamarra
Mayor y Durana, colocado éste sobre la carretera de Francia. El general Hill
debería emprender el ataque por la derecha, ordenándole, que con su ejército de
20.000 soldados se apoderase, en el extremo opuesto de la línea, del paso de La
Puebla y de los montes que corren por Zaldiaran, entre la llanura y Treviño,
mientras que Wellington con su cuartel general y las tropas de Beresford,
atacaría el centro, tomando la dirección de Nanclares y Trespuentes. Estaban
preparándose a marchar las tropas, para ocupar estas posiciones, cuando el 20
recibió Wellington un parte del alcalde de S. Vicente de la Sonsierra,
anunciándole que la división francesa de Clausel había llegado desde Logroño y
que se dirigía precipitadamente por Toloño a unirse al grueso de tropas
imperiales. Esta noticia y el cuidado de que los franceses no ganasen la
cordillera de Arlabán, le decidió a dar la batalla al amanecer del día 21. José
descansó el día 20 en Vitoria y el mariscal Jourdan con fiebre lo pasó en la
cama, y la única órden que dio fue la de enviar un convoy a Salinas de Léniz,
escoltado por la división Maucune, con la esperanza de que Clausel llegara al
día siguiente y de que Wellington no atacaratan pronto.
Disposición
de las tropas
Disposición de las tropas
La posición que habían
tomado los franceses erala siguiente:
en el alto del Zadorra las tropas de Reille ocupaban Durana, Gamarra Mayor y
Abechuco, con fuertes regimientos de dragones a retaguardia entre Arriaga, Ali,
Zuazo y Lermanda. En el centro desde Margarita por Trespuentes y Villodas hasta
Subijana se extendió el ejército de Andalucía, del conde Gazan, cuya división
Maransin se posesionó de los altos de la Puebla desde el boquete hasta Zumelzu.
En segunda línea y como reserva, se colocóel ejército del conde D’Erlon, extendido desde las alturas inmediatas a Vitoria, por Gomecha hasta
Ariñez. Toda la carretera de Francia desde Vitoria hasta Arlaban, estaba
ocupada por el convoy, por la artillería de sitio, coches en que iban las
familias fugitivas y por grandes recuas de caballerías cargadas. Al otro lado
del puerto de Salinas, y sin tener noticia de cuanto pasaba, estaban Maucune,
que había llegado con su convoy a Escoriaza y Mondragón, y el ejército del
general Foy, de 10.000 hombres, que para desgracia de los franceses no acudió
tampoco a tomar parte en la batalla.
DESARROLLO
DE LA CONTIENDA
Pablo Morillo
Comienza la batalla
hacia las 8 de la mañana cuando la
divisiónde Morillo asciende a los altos
de La Puebla y obliga a retroceder a las fuerzas francesas hasta que el avance
aliado es detenido por las tropas de Maransin.
Sobre las 8:30 la brigada Cadogan es enviada en
apoyo de las tropas de Morillo. En el enfrentamiento, Cadogan es mortalmente
herido y sigue el transcurso de la batalla apoyado en dos mochilas.
Hacemos un salto en el
transcurso de la batalla, hasta las 5:00
de la tarde.
Flanco
izquierdo del ejército francés
Hacia
las 5 de la tarde las tropas de Leval que combatían en
Ariñez comienzan su retirada hacia el sudoeste. Este movimiento provoca una
brecha en el frente que hace que los aliados la utilicen como principal punto
de hostigamiento. Gazan, al frente del ejército de Andalucía, vio lo que se le
venía encima, sin pensar en D’Erlon, ni en el ejército del Centro que todavía
estaba luchando en la Llanada, y decidió sin ninguna orden, retirarse hacia el
este. Gazan pudo ver que los aliados estaban bordeando su flanco derecho, por
el lugar dejado por las tropas de Leval, y que los hombres de Cameron empezaban
a aparecer por su flanco izquierdo, y dio órdenes de retirarse de la posición
que estaban manteniendo a lo largo de la línea Gomecha-Esquivel.
D'Erlon
Thomas Picton
Se pueden entender sus
razonamientos: sus dos flancos estaban siendo superados, aunque en parte por su
culpa. Después de que Leval fuera expulsado de Ariñez, él debería haberse
retirado hacia el este, a lo largo del Camino Real, alineándose con el flanco
de D’Erlon, el cual estaba anclado en los alrededores de la localidad de Zuazo.
Gazan hubiera tenido que ordenar a Leval taponar la grieta abierta en Ariñez en
vez de permitirle situarse al sur del Camino Real. Después de todo, Gazan
debería tener un excelente punto de visión, desde su posición en las montañas
sobre la localidadde Gomecha, y
seguramente había visto las consecuencias del error cometido.
Esta retirada sin permiso comprometió
seriamente a D’Erlon cuyo flanco izquierdo quedó comprometido, mientras la 2ª y
4ª divisiones del ejército de Wellington estaban adentrándose a lo largo del
Camino Real por la grieta que se había producido en el frente. El juego
probablemente se había decidido en el momento en que Picton había arrojado a
Leval de Ariñez atravesando el centro izquierdo francés. Con los aliados
avanzando a lo largo de la cima de los Montes de Vitoria, había una pequeña
posibilidad de que Gazan mantuviera su posición con su flanco izquierdo.
Gazan
De todas formas, Gazan
demostró una falta de lealtad, tanto a D’Erlon como a José Bonaparte. En vez de
apuntalar la brecha producida en la línea del frente y moverse a su derecha y
ayudar al ejército del Centro, simplemente la abandonó y se retiró hacia el
este sin ser seriamente presionado por los aliados. Quizás Gazan no fuera el
villano de toda la obra, pero si mereció compartir la culpa por el desastre que
se estaba desarrollando.
Zona
central del ejército francés
Mientras tanto, D’Erlon
luchaba desesperadamente por contener la marea de tropas aliadas que se
dirigían hacia el este a lo largo de la Llanada. Cuando Gazan se había ido de
su izquierda, había poco proyecto de éxito para él. Sus hombres estaban siendo
barridos tanto de la localidad de Crispijana como de la de Zuazo, forzándole a
ocupar una línea que iba desde Ali a Armentia. Ésta fue su posición final
durante la batalla. Hay que decir a favor de D’Erlon que continuó luchando por
retener a la 3ª división, incluso a la 2ª y a la 4ª cuando amenazaban su flanco
izquierdo. D’Erlon tenía 30 cañones que causaban estragos entre las líneas de
la 3ª división. Sin embargo, D’Erlon estaba derrotado. Por un flanco izquierdo Grant,
y Colville y Vandeleur en su flanco derecho habían sobrepasado la localidad de
Ali. D’Erlon y el ejército del Centro eran superados por los dos flancos.
Además, también se producía el avance de tres brigadas británicas a lo largo
del Zadorra que les llevaría rápidamente a contactar con Graham, que combatía
con Reille y el ejército de Portugal en el norte de Vitoria.
D’Erlon no era ningún
loco y podía ver que la situación era insostenible. Por lo tanto, no fue
ninguna sorpresa cuando alrededor de la 5:30
de la tarde recibió una orden de José Bonaparte en la que le ordenaba una
retirada general.
Evolución de la batalla
RETIRADA
FRANCESA
Francisco de Longa
El proceso de retirada
frente a un enemigo avanzando con una solidez agobiante es un negocio muy
peligroso en la mayoría de las veces. En Vitoria era particularmente complicado.
La principal y lógica vía de escape a Francia había sido cortada por los
hombres de Longa en las primeras horas de la tarde cuando (el ataque comenzó hacia las 12:30) tomó la localidad de Gamarra
Menor
La única salida posible
era el camino que iba a Salvatierra y conducía a Pamplona. Era un camino de
herradura y no estaba en buenas condiciones. José Bonaparteordenó a D’Erlon y al ejército del Centro que
se retirara por la vía que transcurre al norte de Vitoria para evitar coincidir
con Gazan y el ejército de Andalucía, el cual se estaba retirando por el sur de
Vitoria.
Flanco
derecho del ejército francés
Graham
Esto dejaba a Reille y
al ejército de Portugal con la difícil tarea de retener a los hombres de Graham
hasta que las últimas tropas del ejército del Centro hubieran pasado. Sería
entonces cuando él mismo comenzaría a retirase pasando al este de Vitoria.
Aunque el flanco
derecho de D’Erlon estuviera superado, el inmediato peligro que acechaba a
Reille venía de su retaguardia izquierda, las tropas británicas habían
comenzado a empujar al este desde más allá de la localidad de Ali. No tenía
sentido mantenerse en sus posiciones. A pesar de las órdenes de quedarse hasta
que el ejército del Centro hubiera pasado, Reille mandó una inmediataretirada desde las posiciones que se ocupaban
a lo largo del Zadorra.
Ataque en Gamarra Mayor
No era fácil porque sus
hombres estaban enzarzados en combate a lo largo de un frente desde Arriaga en
su flanco izquierdo hasta Durana en su flanco derecho. Por otra parte, Oswald y
la 5ª división estaban todavía presionando en Gamarra Mayor, mientras las
tropas de Longa estaban queriendo explotar en su principal campo de batalla que
se había circunscrito tan solo a Durana. A pesar de estas dificultades, Reille maniobró
sus tropas con gran habilidad, haciendo buen uso de la caballería de Digeon,
para retener a la caballería ligera inglesa, tanto dragones como húsares, que
habían comenzado a hacer acto de presencia.
Fue ciertamente una
situación comprometida en Arriaga, en el lado izquierdo de Reille, donde la
brigada de infantería de Menne escapó a duras penas de las garras de la 15ª de
húsares, que venía avanzando desde el sury trataba de aislarlos. Esto se consiguió a costa de un gran sacrificio.
Sin embargo, no solo fueron forzados a dejar todos sus cañones atrás, en los
alrededores de Arriaga, sino que también
perdieron al generalSarrut, un militar
veterano de la campaña peninsular y comandante de división de Menne. Sarrut fue
mortalmente herido y sus hombres comenzaron la retirada.
Carga de los húsares franceses
A menosde una milla al noreste de Vitoria se sitúa
la pequeña localidad de Betoño, frente a la cual Reille había destacado la
brigada Fririon en reserva. Esto serviría ahora como un punto de reunión. Tanto
Menne como Fririon, apoyados por las brigadas de caballería Digeon, Boyer y
Curto, estaban preparados para hacer sus últimos combates y permitirque Lamartinière tuviera una retirada segura
desde Gamarra Mayor.
Esta arriesgada empresa
se fue realizando sin mayor dificultad, seguidos por los hombres de la 5ª
división de Oswald que venían desplegándosea
través del Zadorra en su persecución.
En Durana, mientras
tanto, las tropas franco-españolas bajo el mandato de Casapalacios simplemente
se habían escabullido a través de las colinas al noreste de Vitoria con los
hombres de Longa siguiéndoles.
El ejército de José se
enfrentaba ahora a la difícil tarea de salir de La Llanada que, de hecho,
estaba parcialmente bloqueada por la misma ciudad de Vitoria. El francés
también tenía un sinfín de impedimentos –el gran convoy del tesoro, carretas,
el tren de equipaje, el parque de artillería y los cañones-. Era el caos, causado
por esta gran obstrucción, combinada con la derrota del ejército francés, lo que
llevó a increíbles escenas de desorden e increíble anarquía.
El Ejército de
Wellington llegó como una apisonadora destruyendo cualquier resistencia
ofrecida por los restos del ejército que huía hacia el este.
Al norte de Vitoria las
tropas de D’Erlon se estaban retirando en total desorden a través de los campos,
y a lo largo de caminos en malas condiciones, con la 3ª división
persiguiéndoles.
Reille
(artífice de la salvación del ejército francés)
Reille
Reille había colocado
sus tropas en Betoño, esperando la llegada de Lamartinière desde Gamarra Mayor.
Reille tuvo que retener también a las brigadas de Graham, a lo largo del
Zadorra, bastante tiempo para conseguir que D’Erlon tuviera una buena vía de
escape. Ahora, sin embargo, era su propio turno. No hacía mucho tiempo de la
llegada de Lamartinière cuando Reille se retiró a la localidad de Zurbano, a
unas 2 millas al este de Vitoria. Iba perseguido por todo el ejército de Grahamque había cruzado el Zadorra tan pronto como los franceses habían abandonado
los puentes. Los perseguidores eran guiados por un escuadrón del 12º y otro del
16º de caballería ligera de dragones, que venían tras la retaguardia de Reille
que acababa de llegar a la localidad de Zurbano. Había un claro en el bosque
hacia el oeste. Al principio los dragones fueron rechazados por un combinado francés
de dragones y húsares, pero después de reorganizarse cargaron de nuevo teniendo
esta vez éxito en el intento. Después de repeler a la caballería francesa, los
dragones británicos llegaron a través de la línea 36. Parte de de la brigada
Fririon formó en cuadro a las afueras de la localidad, pero fue la infantería
quién ganó el encuentro, y la caballería británicafue rechazada por descargas de mosquete. Esto
permitió a Reille tener a la mayor parte de la infantería a salvo a través de
los campos y los caminos al norte de la carretera de Salvatierra. Haciendo
esto, evitó la congestión y el desorden a lo largo de la carretera este de
Vitoria. Reille también se preocupó de conseguir 2 de los6 cañones de Lamartinière –resulta increíble que solo 2 cañones se mantuvieran en
manos francesas de los 153 que habían tenido en el campo de batalla-. Aquí la
persecución perdió fuerza. La 5ª división estaba exhausta del trabajo hecho
durante todo el día y de la corta persecución realizada. En efecto, la 5ª
división acampó aquella noche en las afueras de Zurbano, y la 1ª división lo
hizo cerca del Zadorra. Reille nunca sería ya amenazado por los aliados, aunque
algunos de los hombres de Longa que llegaban por las colinas al este de Durana
abrieron fuego a cierta distancia a las columnas en retirada.
Flanco
izquierdo del ejército francés
En otra parte, las
cosas no iban bien para los franceses. Al sur de Vitoria, el ejército de Gazan
se estaba diseminando a través de los campos, cruzados por caminos que tenían
dirección norte-sur, en vez de este-oeste. Así, los fugitivos fueron forzados a
ir campo a través en su intento de salvación. Había poco tiempo para organizar
la huida: era el “¡sálvese quien pueda!”. Las armas y equipamientos fueron
desechados, y los carros de equipaje abandonados, mientras los cañones y los
carros de munición fueron dejados en los campos. Los pocos cañones que se
habían intentado mover, rápidamente se quedaron atascados en el terreno
cenagoso y los tuvieron que dejar a las tropas aliadas. De hecho, Gazan dio
órdenes de abandonar toda su artillería.
Mientras tanto las
tropas de Cameron y Morillo habían comenzado a descender desde los montes de
Vitoria, incluso a provocar el pánico entre las filas francesas ya que empezaron
a presionar la retaguardia de los fugitivos, y cuando las primeras pistolas se
escucharon desde la caballería de Wellington, los húsares de Grant tomaron un
atajo a través de las afueras de Vitoria y la situación se tornó en un caos.
CONVOY
José I Bonaparte
El problema francés
tenía su origen en el tamaño de su convoy. Era enorme, y de un gran valor. El
gran convoy había comenzado a formarse en marzo de 1813 cuando, de acuerdo con
las órdenes de Napoleón, José dejó Madrid y trasladó su cuartel general a
Valladolid. Decidió llevar con él pinturas, bibliotecas, joyas de toda clase y
descripción, dinero, colecciones de muebles y antigüedades, y todo el saqueo
acumulado durante los cinco años de ocupación francesa de España. Además de
este cargamento estaba el séquito de José, el gobierno y sus ministros,
secretarios, sirvientes, parásitos, civiles y sus mujeres y familias de los
propios soldados. Este extraordinario convoy había ido aumentando a medida que
se dirigía al norte, atrayendo a más y más oficiales franceses y lacayos. En el
momento que el convoy llegó a Vitoria se estima que el número de carruajes
llegaba a los 3.000 y que su longitud alcanzaba las 12 millas. Habría que
añadir el equipo del ejército, las reservas de artillería, los carros de
munición, los suministros, ambulancias, los equipos de forja y diversos equipos
más.
En aquellos días, en
concreto el 19 de junio, había llegado un cargamento desde Francia que contenía
no menos de cinco millones y medio de francos de oro para el tesoro real. Este
premio era el que iba a convertir en soldados de una voracidad infame a los
miembros del ejército de Wellington. La situación podría haber sido peor para
los franceses si parte del convoy no hubiera salido el mismo día 19 de junio
por la carretera de Francia, bajo el mando del general Rey, que había sido
recientemente nombrado comandante de la guarnición de San Sebastián. Maucune
había abandonado también la ciudada
primeras horas de la mañana del día mismo de la batalla con otra parte del
convoy. Sin embargo quedaban todavía alrededor de 2.000 vehículos
obstaculizando las salidas desde Vitoria al este de la ciudad, tanto como la
gran cantidad de personal no militar, quienes habían estado siguiendo el
progreso de la batalla aumentando la ansiedad. Poco a poco los proyectiles
aliados comenzaron a explotar en los alrededores de Vitoria y la angustia
rápidamente se convirtió en histeria y pánico, que aumentó cuando las primeras
tropas del ejército Sur de Gazan comenzaron a sobrepasarlos en oleadas desde el
campo de batalla. Todo esto, solo servía para aumentar el atasco a lo largo del
estrecho camino a Salvatierra, que era la única dirección para la salvación de
las fuerzas derrotadas de José Bonaparte.
Huida
de José Bonaparte
Ataque húsar a la retaguardia francesa
Orinal real
El mismo José había
huido del campo de batalla alrededordelas
6:00 de la tarde junto con Jourdan tratando de mantener la apariencia de
orden dentro del caos que se vivía a su alrededor. Los asistentes de José
estaban siendo absorbidos por la marea de pánico. Dándose cuenta que no había
nada que pudiera hacer, José se metió en su carruaje y trató de escapar. Poco
después, sin embargo, él mismo y su séquito se encontraron atascados en medio
de la agitada, aterrorizada multitud de refugiados del campo de batalla. Pronto
los gritos aumentaron ya que los húsares británicos iban sobre ellos. Estaban
las caballerías húsar 10ª, 15ª y 18ª que venían arrasando desde los alrededores
del norte de Vitoria (algunos relatos dicen que ellos fueron a través de la
ciudad) y cargaron al este directo a la retaguardia en total confusión. A pesar
del caos, algunas unidades francesas intentaron resistir a la caballería de
Graham, en particular algunas de la Guardia Real de José, como la del 5º de
cazadores y el 4º y 26º de dragones. No pudieron parar a los húsares británicos.
El capitán Windham del 10º de húsares alcanzó el carruaje de José en el mismo
momento en el que el rey salía por la otra puerta. José evitó ser capturado por
segundos, dejando detrás de él su espada, sellos, algunas ropas, joyas y su
orinal. Jourdan también perdió muchas pertenencias personales, incluyendo su
bastón de mariscal. Fueron cogidos por un cabo del 18º de húsares y enviados
más tarde por Wellington al príncipe regente.
Apresamiento del carruaje del rey
Carga del 13º de Dragones Ligeros
La caballería de
Wellington apenas había estado comprometida durante todo el día, pero ahora,
con el ejército francés en plena huida, existía la necesidad de llevar a cabo
la persecución. Era una perfecta oportunidad para ellos de demostrar que podían
hacerlo, pues nunca antes en los campos de batalla de la península se había
dado una ocasión como ésta para esta sección del ejército.
Además se perdió la
oportunidad de acabar con el ejército francés por una vieja enfermedad del
soldado británico: el deseo del saqueo. Esto no estaba sololimitado a la caballería, también la
infantería había parado para llenar sus bolsillos. De este modo se permitió a
los franceses escapar tan lejos como pudieron.
LA
PERSECUCIÓN DETENIDA
El final de la batalla
de Vitoria es bien conocido. Los hombres de Wellington se encontraron una
escena increíble como perseguidores del ejército francés: los campos cubiertos
por los restos del gran convoy de tesoros de José, sedas, libros, pinturas y
joyas, todo mezclado con los restos y desechos de guerra. El saqueo del convoy
empezó, sin embargo, con la huida de los soldados franceses que desvalijaron
sus propios carros. Los hombres de Wellington simplemente se unieron. Como en
Ciudad Rodrigo y Badajoz, no era inusual ver tanto amigos como enemigo
desvalijando un baúl y repartirse el contenido.
Pillaje
Se ha dicho que nunca
antes se había visto conseguir tan gran botín en el campo de batalla, y
verdaderamente hay una explicación para esto.
Los más importantes
carromatos eran los que habían llegado el 19 de junio trayendo millones de
francos de oro pertenecientes al subsidio francés. Wellington había esperado que esto llenara su propio baúl militar, y
pagar los atrasos que debía a sus hombres, pero quedó totalmente decepcionado
porque tan solo 250.000 francos fueron recuperados, el resto se lo llevaron los
soldados.
El tesorero de José,
Thiebault, fue tiroteado ymuerto en el
acto al intentar defender la caja que contenía 100.000 francos.
Conclusión
Para terminar, unas
palabras atribuidas al conde Gazan: “perdieron todos sus convoyes y equipajes,
todos sus cañones, todo su dinero, todas sus provisiones y todos sus papeles;
de modo que nadie podía probar lo que se le debía, y que generales, oficiales y
soldados, viéronse reducidos a lo que llevaban encima, hallándose la mayor
parte hasta descalzos”. Jamás se vio
ejército peor empleado; apenas tomó parte en la refriega una mitad de las
tropas ysin embargo fue completa la
derrota, si bien el vencedor no supo tornarla en su provecho cual debiera.
ASKARTZA-VITORIA
EL 21 DE JULIO DE 1813
Plano del Campo de la Batalla de Vitoria
El motivo por el que
hemos estado tratando el tema de “La Batalla de Vitoria” es por la presencia de
Askartza-Vitoria en la retirada francesa.
Askartza-Vitoriay los pueblos de su alrededor estuvieron
presentes durante la huida del ejército francés, una desbandada que comienza
aproximadamente a las 5:00 de la tarde.
Leval abandona su
posición en la localidad de Ariñez sobrepasando el Camino Real y se dirigehacia el flanco izquierdo en el que estaba el
ejército de Andalucía, cuando se descompensa todo el frente y antes de verse
superado por los dos flancos, el conde de Gazan al frente del ejército de
Andalucía manda la retirada de su ejército sin esperar órdenes de José
Bonaparte.
Según Becerro de Bengoa
en su obra “Descripción de la Batalla de Vitoria”: “Gazan pasó por Gomecha y
Armentia, y tomando el camino de Zumaquera se dirigió hacia Argómaniz.”
Camino de Aracaya que se dirigia a Ilarraza
Si tenemos en cuenta el
mapa del coronel Juan Velasco Marqués de Villa-Antonia, editado en 1858, se
puede ver en él, el camino de retirada que utiliza el ejército francés y que
coincide con lo narrado por Becerro de Bengoa en su obra “Descripción de la
Batalla de Vitoria”. En él se observa que el ejército en retirada toma el
camino de Zumaquera y se dirige a la localidad de Arcaya, cruzándola. Posteriormente
atraviesa la carretera de Estella, sigue por un antiguo camino hoy ya desaparecido
que continuaba hasta Ilárraza y desde esta localidad, dirigirse a Pamplona.
Río Oscuro desde el alto Petriquiz
Este camino que iba
desde Arcaya hasta Ilárraza desapareció en los años 60-70 del siglo pasado
cuando se hizo la concentración parcelaria. Dicho camino atravesaba el término
de Askartza conocido como Río Oscuro, por el cual atraviesa el río Errekaberri.
Hasta la concentración parcelaria había un puente que permitía cruzar el río,
pero con la concentración también desapareció.
Río Oscuro
Durante el atardecer
del día 21 de junio de 1813, este camino y este puente a los que nos referimos
fueron de obligado uso para el ejército de Andalucía al mando del conde Gazan
en su necesidad de alcanzar el camino de Pamplona.
Cuando en los años 60
del siglo XX se introdujo la tracción mecánica en los trabajos agrícolas, los
arados penetraban más en la tierra sacando al exterior balas de cañón de
diferentes calibres. Tipos de balas encontradas:
Las
balas de cañón eran bolas sólidas de hierro que variaban en tamaño y su peso: 3
libras, 6 libras o 12 libras.
Si
bien los hombres podrían ser aplastados por una Roundshot, rebotando en la
tierra seca el daño era aun mayor. En cambio en caso de lluvia la bala se
quedaría enterrada al tocar la tierra húmeda y se detendría.
Una bala de cañón
impactando en un batallón en línea frontal golpearía, a lo sumo, a no más de 2
o 3 soldados, en cambio al hacerlo en una columna podría derribar a 20 o más
infantes.
El Bote de metralla o Canister.
Era letal a corta
distancia. Construido de estaño fino, el bote estaba lleno de bolas de plomo de
hasta 200 gramos cada una y se rompían al salir del cañón.
La expansión de los proyectiles podría romper las filas enemigas, dejándoles
enormes brechas en la línea.
Granada o Shell.
El shell era de piel
delgada, con un fusible de tiempo corto de modo que iba a explotar en el
interior de gran parte de las tropas enemigas. La cáscara al desintegrarse
rociaría de metralla un área grande, hiriendo o matando a tantos oponentes como
fuera posible.
¿Balas clase shell? Tienen un diámetro de 16,98 cm y un peso de 20 kg, con orificio hueco. encontrada en el cauce del río Errekaberri en el término de Río Oscuro.
Quiero dar mis agradecimientos a las familias Ortiz de Zárate, Caicedo y Arrausi de la localidad de Askartza-Vitoria por la información que me han facilitado.